📝&📷: Fernando Tapia

Muchas veces en la vida tenemos planes y deseos que buscamos realizar y, sin embargo, en ocasiones, los resultados terminan siendo diferente a lo esperado. A veces es complicado entender “el por qué” ni mucho menos hablar de aceptar la voluntad de Dios, la Vida o del Universo, sea cual sea el nombre que decidas darle.

Sin embargo, algo que he aprendido sobre cómo hacer más llevaderos los cambios repentinos que la vida nos depara, es el hecho de saber que existen experiencias que nos marcan profundamente y nos hacen re considerar nuestra perspectiva de nuestras metas y sueños, pero que al final del día, lo único que hacen es re dirigirnos a un mejor lugar, situación u experiencia.


A continuación, te comparto los pasos que sigo, cuando las cosas no salen como las planeaba y si bien, no te puedo asegurar que conseguirás algo mejor, por lo menos podrás llevar las cosas con más calma. 

Para ejemplificar los siguientes pasos, revisemos un ejemplo de cómo podríamos manejar alguna situación:  Supongamos que aplicaste para un programa en el extranjero y todo estaba listo para emprender tu nueva aventura, de repente, pierdes el vuelo, o tu visa ha sido rechazada, etc. Es lógico que te sientas molesto y frustrado. Ya que es algo que deseabas e incluso planeaste de acuerdo a lo esperado.  Dentro de ti empiezan a surgir una serie de emociones, surge un remolino que te recorre de los pies a la cabeza y sientes que el mundo se viene abajo. 

Es entonces, que escuchas a muchas personas decirte, “por algo pasan las cosas” “a lo mejor te salvaste de una mala racha” etc.


Pese a que escuches esto de seres queridos como algún miembro de tu familia y/o amigos, y aunque las personas quieren ayudarte a sentirte mejor, en ocasiones, estos dichos en lugar de beneficiar parecieran empeorar nuestro sentir.  Entonces, rememora, está bien estar enojado, está bien estar frustrado porque desde el momento en que reconoces como y lo que sientes, estás dando un paso hacia tu propia capacidad de manejar la situación desde una perspectiva más objetiva.

Deja que fluya, al dejar de resistirte será más fácil que la experiencia se mueva y en determinado punto te darás cuenta que al aceptar las cosas como son, esta vivencia no se verá como una enemiga, sino, como un momento que te toco saborear. Recuerda, cada momento aceptado y vivido desaparece”

En seguida, te recomiendo que te sientes en un lugar cómodo y escuches tu música favorita, toma algunas respiraciones y comienza a formular afirmaciones positivas de lo que deseas que suceda en tu vida.  Nuevamente no luches, acepta, si llegan emociones o pensamientos que te indiquen que no lograste lo que querías, sólo permanece escucha y transforma.  Por ejemplo, si has decidido tomarte tus 5 minutos de respiración y comienzas a formular afirmaciones como “Estoy abierto y receptivo a nuevas aventuras” “La vida siempre me apoya en todo lo que necesito” y de repente llega el pensamiento opuesto y te dice, eso no es verdad, si no pudiste una vez ¿qué te hace pensar que lo podrás conseguir en esta ocasión? 


Puedes tomarte un momento, volver a respirar y decir, Es verdad que eso sucedió, pero también es verdad que la vida es mutable y constantemente cambia. Por lo tanto, es posible que en esta ocasión las cosas funcionen mejor de lo esperado. Puede que esto te tome un tiempo, pero, si te comprometes, los resultados que alcances serán maravillosos. 

Finalmente, cuando estés más relajado/a, siéntate y revisa, sí existió algo en ti que contribuyó a que esta situación no se concretará. Será una charla contigo mismo/a que podrá tornarse incómoda, pues tendrás que hablarte con la verdad. No es una cuestión de generar culpas ni juicios, sino, tener la apertura de reconocer y entender que a veces, somos nosotros los que nos frenamos y en que realidad la vida, Dios, el Universo, no son precisamente responsables de las situaciones que creamos en nuestro diario vivir. 


Tomar la vida con más calma resulta irónico, pues en realidad es un hábito que se transformará en tu estilo de vida. Por lo tanto, te invito a que apliques los pasos arriba descritos y compruebes por ti mismo/a tu capacidad de sacarle el lado bueno a las situaciones que la vida nos da.